La piel deshidratada no es inevitable pero requiere cuidados especiales. ¿Cómo solucionarlo y qué rutina adoptar? Te damos las claves.

¿Cuáles son los síntomas de la piel deshidratada?

Si prestas suficiente atención a tu piel, podrás aprender a comprenderla y notar cuando sufre. Problemas de piel, imperfecciones, picores o simple deshidratación. Cuanto más sepamos cuidar nuestra barrera cutánea, mejor será. Dado que aquí nos interesa especialmente el fenómeno de la piel deshidratada, aquí te presentamos algunos signos importantes que ayudan a diagnosticar el problema:

• Líneas finas marcadas. Las líneas finas aparecen naturalmente con la edad. Si lo notas en tu rostro, especialmente alrededor de los ojos y la boca, mientras aún estás en su mejor momento, puede ser una señal de que tu piel sufre deshidratación y envejecimiento cutáneo prematuro.
• Piel que se siente tirante. Realmente no es nada agradable... una sensación de tirantez perpetua y picor puede indicar que tu piel seca necesita hidratación y que la película hidrolipídica de la piel está dañada.
• Una textura rugosa.
• Si tu piel tiene una textura áspera y seca, con la capa superficial descamada, lo más probable es que sea otra señal de que le falta agua.
• Piel apagada y con imperfecciones. La tez gris y triste, la piel grasa, los puntos negros, los pequeños granos son señales que te alarman sobre la deshidratación de la piel.
• Poros visibles. La piel deshidratada puede revelar poros visibles, particularmente en la zona T (frente, nariz, barbilla), conocida por ser la más sensible a los problemas de la piel.

Pero ¿por qué la piel se deshidrata?

Las causas pueden ser numerosas. La deshidratación de la piel, a veces ocasional y a veces genética, no debe tomarse a la ligera ya que, en casos extremos, puede provocar problemas cutáneos importantes.

Piel deshidratada por falta de agua

Esta es obviamente la causa número uno y la más lógica. Cuando nos falta agua nos deshidratamos. Cuando al cuerpo le falta agua, la piel claramente puede sufrir y se nota. Esta falta de agua puede deberse a una ingesta insuficiente de agua, a un ambiente seco o a una sudoración excesiva. Para remediar esto, asegúrate de tener una botella de agua a tu lado para poder beber lo suficiente a lo largo del día. Si no eres fanático del sabor insípido del agua, ahora existen pequeñas tabletas con múltiples sabores que te permiten darle sabor al agua. De forma más natural, puedes optar por agua detox con menta, limón, jengibre o incluso albahaca para infusionar.

cambios estacionales

Ésta es una razón bien conocida. Cada cambio de estación trae consigo su cuota de pequeñas molestias, la piel deshidratada es una de ellas. Dado que el cuerpo debe adaptarse a las nuevas temperaturas pero también a un nuevo ritmo de vida, su ciclo natural (como la falta de sueño) y su ingesta de agua (a través de los alimentos) pueden verse afectados. Para evitar este fenómeno de deshidratación en particular, es fundamental adaptar el estilo de vida en función de las estaciones, adoptando una nueva rutina alimentaria pero también una nueva rutina de cuidados que proporcione a la piel la hidratación que necesita a través de los productos de cuidado utilizados, como crema de día, sérum de pestañas, rostro o contorno de ojos , o incluso crema de noche.

La rutina de belleza equivocada

Las rutinas de cuidado de día y de noche, el ritual de limpieza de la piel, el maquillaje y los momentos capullo deben adaptarse a tu tipo de piel para evitar inconvenientes notorios como la deshidratación. No debes lanzarte a la primera tendencia Tiktok, al primer bálsamo, a la primera crema o al primer sérum que aparece simplemente porque está de moda o lo recomienda tal o cual persona. Lo principal para tener una piel bonita es utilizar una rutina adaptada a ti. Para asegurarlo, no debemos dudar en probar con diferentes muestras lo que más nos convenga. ¡Respeta tu piel y ella te recompensará!

Factores externos...

Nuestras vidas agitadas de estrés, contaminación, alcohol, mal maquillaje, tabaco y una dieta desequilibrada pueden contribuir en gran medida a la deshidratación de la piel. Para remediar esto, sólo necesitas aplicar los puntos vistos anteriormente, beber suficiente agua, comer sano, adoptar la rutina de belleza adecuada y amar tu piel.

Qué evitar a toda costa cuando tienes la piel deshidratada

Si sufres de piel deshidratada, aquí tienes algunos puntos que debes evitar para no agravar el problema:

• Limpiadores agresivos: es importante una buena higiene pero evitamos los limpiadores agresivos para la piel. Aquellos que contienen ingredientes como alcohol o sulfatos. Estos ingredientes pueden eliminar los aceites naturales de la piel y alterar la barrera cutánea, lo que puede empeorar la deshidratación... También deshazte de todo lo que diga doble limpieza y otras tendencias de cuidado de la piel facial que puedan socavar por completo la función principal de la barrera cutánea y alcanzar la película hidro.

• Demasiada exfoliación: los productos exfoliantes son excelentes para eliminar las células muertas de la piel, pero también pueden empeorar la deshidratación al eliminar los aceites naturales de la piel. Evitamos las exfoliaciones repetidas y preferimos las exfoliaciones químicas que eliminan la piel muerta sin atacar la barrera cutánea y proporcionan una tez radiante y encantadora.

• Duchas o baños demasiado calientes: y sí, el agua demasiado caliente despoja la piel de sus aceites naturales. Estos mismos aceites que nutren e hidratan naturalmente la piel, por lo que lo mejor es evitar duchas o baños demasiado calientes…

• Todos los productos que contienen alcohol: es cada vez más raro pero todavía lo encontramos a veces. Los productos para la piel que contienen alcohol pueden dañar gravemente la hidratación de la piel, ¡así que evítalos! Por ejemplo, elige bálsamos limpiadores súper ricos o neutros, champús sin sulfatos ni parabenos, aceites vegetales naturales para el cuerpo y aguas florales como el agua de rosas , hamamelis o geranio para el rostro…

• Exceso de exposición al sol: el sol, nuestro falso amigo, puede dañar la barrera cutánea y empeorar la deshidratación. Aunque resulte tentador tomar la pastilla durante horas para tener un cutis perfectamente bronceado, lo olvidamos. En su lugar, ¡recuerde usar protección solar de amplio espectro (UVB/UVA) todos los días!