El sauna fácil, baño de vapor o sauna facial, consiste en limpiar profundamente tu rostro utilizando vapor de agua… ¿Cómo hacerlo en casa? Te lo contamos todo.

La Sauna Facial es un método y técnica de tratamiento de belleza que se basa en el principio de que el vapor de agua caliente es excelente para cuidar nuestra piel. La técnica no es nueva y los países asiáticos la utilizan desde hace mucho tiempo.

En Occidente se está volviendo cada vez más popular y se suele ofrecer en salones de belleza. Sin embargo, desde hace un tiempo las marcas ofrecen dispositivos que permiten hacer esto en casa. ¿La idea? Regálale a tu rostro un ritual de sauna, con un baño de vapor caliente totalmente específico, para eliminar las impurezas incrustadas.

Sauna facial y baño de vapor ¿cuál es la diferencia?

La Sauna Facial es un dispositivo con tecnología patentada. Está completamente inspirado en el baño de vapor que se puede hacer en casa con extrema precaución, sobre una olla con agua hirviendo (al cocinar pasta, por ejemplo...). ¡Obviamente el segundo método puede ser un poco peligroso!

La Sauna Facial actúa como purificador de la piel con la seguridad de un dispositivo homologado. Su tecnología nano care facilita la penetración profunda del vapor de agua. En realidad, este mecanismo crea nanopartículas de vapor, ¡8000 veces más pequeñas que el vapor de agua generado por un simple baño de vapor! Por tanto, el dispositivo permite una mayor eficiencia que su antecesor manual. Abre delicadamente los poros, desaloja las impurezas y permite una impregnación más fácil de los tratamientos de cuidado de la piel en casa.

¿Cómo utilizar la Sauna Facial en casa?

Las marcas de dispositivos de belleza tecnológicos ofrecen ahora los llamados dispositivos “nómadas” para crear tu Sauna Facial incluso en casa. Antes de utilizar la sauna, debes asegurarte de que tu piel esté preparada, es decir, ¡que esté limpia! Por eso pensamos en una limpieza, delicada y precisa, con un jabón o un producto de lavado adecuado.

El Sauna Facial tiene una boquilla que se adapta a la forma del rostro, por lo que lo ideal es colocar tu rostro sobre ella y activar el proceso de vapor. El tratamiento dura entre 15 y 20 minutos, el tiempo se adapta según tus necesidades. Ideal para pieles maduras, es válido para todo tipo de pieles ¡excepto aquellas con problemas cutáneos graves!

Es bueno saberlo: la piel mixta a grasa puede permitirse un uso regular de una a dos veces por semana. Pero ojo, las pieles sensibles o secas sólo lo necesitarán una vez al mes. La sauna facial definitivamente no se recomienda para quienes padecen cortes, psoriasis o incluso eczema. Para qué ? La Sauna Facial estimula el flujo sanguíneo a través del vapor de agua, efecto que es mejor evitar en este tipo de problemas.

Aceites esenciales en acción

La Sauna Facial utiliza vapor de agua por supuesto, ¡pero podemos combinar su acción limpiadora con los efectos purificantes y calmantes de los aceites esenciales dependiendo de estas pequeñas preocupaciones de la piel! Nada es mejor para la piel que dejarse mimar profundamente por la acción milagrosa de los aceites esenciales.

Aceite esencial de Árbol de Té para purificar y eliminar imperfecciones rebeldes (ideal para el acné). Aceite esencial de pomelo por su acción astringente, aceite esencial de ylang-ylang para calmar... Hay un aceite para cada problema pero antes de cualquier uso es necesario consultar su dosificación o pedir consejo a un especialista de venta.

¿Qué pasa con el baño de vapor?

La sauna facial tiene un coste determinado, entre 30 y 130 euros para los aparatos más eficientes. Se trata de un presupuesto que no necesariamente todos podemos permitirnos, por lo que el baño de vapor sigue siendo la solución más económica.

Pero cuidado, te pide que estés atento porque la cara se encuentra entonces sobre un recipiente con agua hirviendo. El baño de vapor tiene virtudes ancestrales: abre los poros para limpiarlos, estimula la circulación sanguínea del rostro (para una tez radiante), previene las imperfecciones (puntos negros y espinillas) y prepara la piel de forma óptima para los tratamientos.

Destacar que también actúa sobre la salud, ya que se acostumbra utilizarlo para calmar o incluso eliminar un resfriado. El vapor calma las mucosas.

¿Cómo hacer un baño de vapor facial?

Lo que necesitamos para esta sauna facial: un cazo, una toalla, aceites esenciales y algunas hierbas aromáticas. Antes del baño de vapor, puedes realizar una suave exfoliación facial para eliminar la piel muerta y preparar la piel para una limpieza profunda.

En casa, cómodamente instalados, preparamos previamente un litro de agua hervida al fuego o en la tetera, que vertemos en una olla o cazo. Se añaden aceites esenciales (como hemos visto anteriormente) o hierbas aromáticas como lavanda, tomillo o incluso romero…

Al igual que con la Sauna Facial, asegúrese de que su piel esté suficientemente limpia antes de utilizar el baño de vapor facial. La mezcla de aceites y hierbas se deja en infusión durante un rato. Una vez que el vapor de agua parezca estar a la temperatura adecuada (no debe estar demasiado caliente para evitar quemaduras), creamos un espacio cerrado entre la sartén y la cara, utilizando la toalla colocándola sobre la cabeza. Apoyamos la cara sobre el cuenco (30 centímetros como máximo) y disfrutamos de este momento de spa en casa durante unos 20 minutos. Además de ser bueno para la piel, el vapor con hierbas y aceites también es excelente para las vías respiratorias.

¿Y después? Una vez que el baño de vapor ha cumplido su función depurativa, es el momento de aprovecharlo para aplicar tus tratamientos y dejar que los principios activos penetren en profundidad. A continuación aplicamos nuestra rutina habitual de cuidados cosméticos. Primero, aplica una mascarilla si sientes que la piel lo necesita. ¡A continuación aplicamos un chorrito de agua floral para tonificar la piel! Luego pasamos al sérum facial, sérum para el contorno de ojos (imprescindible para prevenir o eliminar ojeras y bolsas ), crema de día o ¡incluso un sérum para el crecimiento de pestañas o cejas !

Al igual que la sauna facial, el baño de vapor se puede realizar una o dos veces por semana para pieles grasas a mixtas, solo una o dos veces al mes para pieles sensibles y debe evitarse en pieles que sufren de eczema, psoriasis, rosácea y otras pieles en carne viva. problemas.